La locura por Shopkins de Maia comenzó hace unos dos años aproximadamente. Ya había visto algo en YouTube, pero vimos la aldea de los Shopkins en City club y Maia decidió que eso le pediría a Santa Claus, pedido que se le cumplió:
Y de ahí, el delirio fue en aumento. Para su cumpleaños 8 viajamos a Ciudad de México como regalo de cumpleaños y allí conseguimos productos originales y eran tantos, que a la pobrecita le costó elegir sólo 2:
Y la perdición de las perdiciones fue encntrar las sábanas y manta y acolchado de Shopkins… por supuesto, la compra fue justificada con la renovación de su habitación:
Por supuesto, que a estas alturas, Maia ya estaba pensando en qué cosa de Shopkins pedirle a Santa Claus y a los Reyes Magos. Y se le cumplió! Le trajeron un almohadón de la fresa (por favor, no se les ocurra preguntarme el nombre) pero es de marca Vianney, la muñeca Melodine y la wafflera:
Lo que amo de los productos Shopkins es su excelente calidad: no se deforman ni pierden el color con el paso del tiempo. Y aunque contienen piezas pequeñas y no se recomiendan para los peques más peques, creo que es un excelente regalo para los más grandecitos.
Ya en enero de este año viajé a Ciudad de México y por supuesto, volví a la juguetería que tanto amó Maia y le traje estas 2 pequeñeces: La muñeca Kristea y un potecito sorpresa:
Un apartado especial para las muñecas de Shopkins, a quien yo no conocía y una querida amiga (Yen) me las hizo conocer.
Qué opinan? Tiene en casa fans de los Shopkins?
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Imagen | Young girl holding Shopkins a range of tiny collectable toys
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