Esto que les comparto sucedió hace un tiempo atrás. Y como pasó varias veces, Sofía tomó nota.
Hay tramos entre el kinder y la casa, en los que no hace falta que lleve a Sofía de la mano; ya sea porque cruzamos un parque, o porque vamos por veredas de calles muy tranquilas. Aun así, Sofía aun no se niega a tomarme de la mano si yo se lo pido.
Y paso que Sofi notó que cuando nos topábamos con algún extraño, yo le apretaba un poco más fuerte su manita. Para mí, algo inconsciente.
Mama, por qué aprietas mi mano?
No se hijita. Supongo que por miedo.
Ah!
Nos pasó varias veces más, pero Sofía ya no dijo nada. Creo que ya aprendí a no apretar la mano de mi hija, solo a sostenerla…
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Soy Viviana y escribo en este blog desde el 2005. Mamá de Sofía (2005) y Maia (2010). Doula certificada, Social Media Mom, Escritora Freelance & WAHM.
Todos sentimos ese miedo. Es normal. Pero también debemos aprender a darle libertad a nuestros hijos y eso si que cuesta más.
Besos.
Es dificil de manejar los miedos y el inconciente, más en estos tiempos violentos.
Un beso
Si, yo se q es normal… despues de todo, somos seres humanos. Pero Wen, cuando mi hija esta involucrada Sofi, si me pongo loca…
Fabi: los chistoso q aqui no hay casos de inseguridad, vivimos en pleno centro de Cancun…