Sofia miraba uno de sus libros, y en una de las ilustraciones, de fondo, habia un mapa del mundo. Claro, no era perfecto, estaba la silueta porque no era lo central de la ilustración.
Sofia me pregunta:
– ¿De dónde es este mapa, mamá?
– Uhm… es un mapa del mundo hija, aunque no esta muy bien dibujado
Sofi sigue lo contemplando largo tiempo. Me vuelve a mostrar el mapa, esta vez, señalando una minúscula isla, muy al norte
– Quiero visitar esa islita.
Así, con la simplicidad de quien sale a la calle y ahí está el transporte que la lleva a esa isla.
– Ay hija, esa isla está muuuuuuuuuuuuuuuy lejos
– ¿Donde mamá, donde?
Calculo y le digo
– Eso es Rusia. Seguro es Rusia, un país que se llama así. Vamos a ver un mapa.
Y buscamos en el iPad (gracias Google Maps) y resultó ser la isla de Ostrov Kolguyev. Dios, apenas puedo pronunciar el nombre
– Mamá, pero yo quiero ir.
– ¿Sabes? Tengo una amiga que se llama igual que tú y nació en Rusia, deja que le pregunte cuando podemos ir.
– SIIIIIIIIII mamáaaaaaaaa
A Sofie -mi amiga- creo que le causó mucha gracia cuando se lo comenté, y me preguntó cuando viajábamos.
Como le respondí, creo que allí no existe el verano, si no, iría con gusto!.
Pues ya puedes ir ahorrando Vivi…
Me ha gustado muchísimo esta anécdota. Amo a nuestra reina Batata.
Besos.
Gracias Wen !!!
Pero si ahorro es para ir por otras partes de Europa y no a Rusia, te lo aseguro jajaj