Su Santidad, el Papa Francisco ha demostrado desde el primer minuto, estar cerca del pueblo, de los feligreses.
La prensa gráfica y televisiva nos lo ha mostrado abrazando a personas con serias deformaciones, invitando a homeless a desayunar con el y llevándole una silla al Guardia Suizo que estaba vigilando la entrad a su residencia.
Sencillo y humilde, se mostró tal cual es en una entrevista con un periódico italiano, y contó una anécdota que lo pinta de cuerpo entero: su encuentro con una mamá que tenía en sus brazos un bebé que lloraba.
En la audiencia general de los miércoles, me acerqué a la gente y junto a las barreras que nos separaban, estaba una joven madre con un bebé en brazos, de pocos meses de edad. El niño lloraba cuando me detuve junto a ellos. La madre lo acariciaba. Yo le dije: «Señora, creo que bebé tiene hambre».
«Sí, seguro ya es su hora de…», respondió ella sin completar la frase.
«Por favor, déle algo de comer!», le dije.
Ella era tímida y no quería dar el pecho en público, mientras que yo estaba pasando. Quiero decir lo mismo que le dije ella, a la humanidad: denle a la gente algo para comer!
Este respeto hacia esa madre me parece digno de replicar, ante aquellos que tiemblan al ver que una madre va a amamantar en público. Algo natural, perfecto, sano y lógico para un bebé, no puede crear controversia en ningún ámbito, en ningún lugar.
Pero esta no es la primera vez que el líder de la Iglesia Católica tiene un gesto así. Hace años, cuando aún era Cardenal Primado de la República Argentina, para un Jueves Santo (en donde se recuerda el lavado de pies que Jesús hizo a sus discípulos) Su Santidad lavó los pies de muchos recién nacidos en una maternidad de la capital argentina. Incluso, muchos de esos bebés estaban tomando el pecho de sus madres y el Papa Francisco no se inmutó.
He sabido de muchas mamás que se privan de asistir a misa con sus bebés, para no tener que amamantarlos en público por miedo a estar faltando el respeto a Dios, a los otros feligreses o peor! algunas ya fueron censuradas por otros católicos, diciendo que eso era una falta de respeto.
Ya ven? Su Santidad atrae. No aleja.
Aprendan.
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justo después de leer tu post y un par de notas mas del tema, platicaba con mi mamá y mientras ella me decía que aprendió de lactancia mal vista en publico hasta que llego al Distrito federal y mientras comentábamos del tema y de lo bueno de la acción del Papa alguien nos interrumpió con los clásicos comentarios sobre el «pudor» y el «respeto a las demás personas» cuando me sorprendió su respuesta, -Lo obsceno esta en quien lo ve, no en quien lo hace y si les molesta que se volteen- la polémica me hizo ver que aunque no debería sigue necesario que mas personas levanten la voz y luchen por un derecho que es natural, amamantar en publico sin censura.
Te dejo también una entrada que habla de esta lucha y que en los comentarios se ve como las personas tienen una rara visión sobre el tema
http://unamadreunhijo.blogspot.mx/2013/08/segunda-fiesta-mexicana-de-la-lactancia.html
Saludos y buen inicio de año
Me gusta Francisco!
Si !! a muchos!!
Yo amé este post, me gustó mucho.
Yo en lo personal viví experiencias dodne me veían feo o me hacían algún comentario negativo sobre que amamantara en la iglesia. Claro me venía guango como decimos acá, pero a muchas les ha fastidiado la vida.
Cool por este post! Ya desde antes lo compartí jeje
Besos!
Si, que onda con la gente?
Los se dicen representantes del Salvador deben siempre comportarse como él lo haría. Bravo por el papa Francisco.
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